Desnudar el libro mientras se lee

 

 

Toda lectura es una intervención en el relato escrito. 

 

Cortar, sustraer, dejar que el entorno le afecte, añadir, subrayar, tachar, escribir en los huecos, dibujar en él, arrancar, romper, alterar la forma, borrar, vaciar, manchar, colorear, dejar que otros actúen sobre él, hacer con él otro libro... Todo eso hacen de alguna manera nuestros ojos cuando leen una historia. 

 

Modificamos lo que sucede a medida que pasamos páginas y llevamos el relato a nuestra imaginación para asomarla al espejo de nuestra experiencia.

 

Yo soy la escritora y también la lectora de "Un lugar llamado éxtasis". Esta esquizofrenia me permite cambiar el relato una y mil veces, hacer que los personajes vayan hacia un lado o hacia otro, que mueran y renazcan cuantas veces imagine. ¿Por qué no compartir ese poder? 

 

Tienes en tus manos este volúmen. Rompe, rasga, tacha, incorpora, cuestiona... Envíame tu propuesta y yo la incorporaré en la edición final del libro.

 

En la fotografía tienes un ejemplo, eso es lo que hizo con el éxtasis Miguel Amate.

 

Te recuerdo el mail: lapiel.relatoseroticos@gmail.com